El longboard es un deporte que consiste en bajar en una tabla a grandes velocidades con la única posibilidad de frenar con unos discos puestos en las manos del deportista. Y es en el Parque Nacional donde se reúnen grupos de jóvenes para lanzarse sobre ruedas desde lo más alto arriesgándolo todo.
La práctica de este deporte no tiene ningún problema, el problema está en que se realiza en una vía pública, por donde transitan, día a día, vehículos y personas. Sin embargo, Mateo Vargas, un patinador de experiencia afirma que no hay peligro de estar allí.
Los amantes del longboard no tienen un sitio exclusivo para ellos, por eso se buscó una respuesta con César Prieto, funcionario del IDRD encargado de deportes urbanos, quien estipula que es necesaria la creación de un grupo que le de voz a los deportistas.
La solución para estos chicos está en formar una organización que exija al distrito una creación de un espacio apto para montar tranquilamente sin ocasionar accidentes en vías públicas.