En la historia el cine, han pasado diferentes personajes y películas terroríficas, ocultistas y demoniacas. Desde 1910 con la adaptación del mito de Frankenstein por J.Searle Dawley, pasando por El Espinazo del Diablo, Los Sin Nombre, La Bruja de Blair, hasta las últimas tendencias como Holocausto Caníbal, Cloverfield y Actividad Paranormal, donde se marca el esquema de diferentes espectáculos siniestros.
Pero si se desea recordar los personajes de todas estas películas, estos se encuentran recopilados dentro de una casa en el sector de Palo Blanco en Bogotá, bajo el cuidado y control de Patricia Parra Venturoli, quien lleva más de 35 años coleccionando figuras de terror.
En su casa, tiene más de 960 figuras. La sala, los pasillos, las habitaciones y hasta la cocina, son los espacios destinados para su colección que cada 15 días completa con entre dos a tres figuras más, su interés por recolectar y ver, día a día, más cosas en su casa, fue la que la llevó a tener “El Museo de Terror” en su propia casa.
“En vez de llorar viendo novelas, ella siempre disfrutaba de los litros de sangre en las películas de terror, en vez de pegar el dedo partido a una bailarina de porcelana, se inclinaba por peinar el cabello rojo de un Chuki, quien ha sido su muñeco favorito durante toda su colección, siempre le brillarán sus ojos cada vez que salga al mercado una nueva figura”: cuenta Andrés Bernal, seguidor de sus años como coleccionista.
El año pasado se ganó el premio como “Coleccionista de terror más grande de Colombia”, así describe su afición Patricia Parra:
