La policía y miembros logísticos de Transmilenio vienen realizando operativos para que las estaciones y articulados no tengan presencia de vendedores ambulantes, para hacer cumplir la norma de prohibición de negocios comerciales al interior del mismo.
Según la última encuesta realizada, el 43% de los usuarios consumen productos ofrecidos por trabajadores informales dentro del sistema, lo cual es una situación que obstaculiza el cumplimiento de la regla porque hace que este negocio sea rentable y se siga presentando.
Al interior de Transmilenio es habitual encontrar vendedores de dulces, músicos, cuenteros o personas que relatan sus dificultades para obtener un beneficio económico de los usuarios. Clara, quien pidió que su nombre se cambiara por sentir en riesgo su trabajo, es una vendedora ambulante que usa este medio de transporte para obtener su sustento y el de su familia: